En el Vaticano, se ha desarrollado un convenio titulado The good Algorithm, Artificial Intelligence (El buen Algoritmo, la inteligencia artificial), promovido por la Pontificia Academia para la vida, con la presencia de muchas personalidades y expertos que han participado en el Workshop (taller). Como conclusión del evento, se ha presentado la Rome Call for AI Ethics (el llamado de Roma para Ética IA), una Carta ética, que ha tenido como primeros firmantes al presidente de Microsoft Brad Smith y al vicepresidente de Ibm John Kelly III.
Un llamado concreto por la estructura abierta, que parte desde un principio fundamental: la inteligencia artificial debe ser al servicio de la humanidad y no al contrario. El Papa Francisco, en un discurso leído a la asamblea, se expresó así «La galaxia digital y la así llamada inteligencia artificial, se encuentran en el corazón del cambio de época que estamos atravesando. La innovación digital, toca a todos los aspectos de la vida e incide sobre la forma de comprender el mundo y a nosotros mismos».