El Festival de la comunicación 2015, celebrado en Cosenza del 10 al 17 de mayo, ha visto la conjunción de tres fiestas significativas: los 90 años del semanario diocesano Parole di Vita, los 10 años del Festival llamado Paoline-Paolini, los 100 años de fundación de las Hijas de San Pablo. Tres aniversarios recordados con entusiasmo en el curso del evento, por ser muy cercanos al sentido mismo de la comunicación: dar espacio a las buenas noticias, evangelizar con la comunicación, celebrar la Jornada anual de las Comunicaciones Sociales.
Entre las varias iniciativas que han espaciado el ámbito de la familia, del deporte, de la devoción mariana, de la agregación juvenil, ha atraído más la atención a un encuentro en la Universidad, en un aula llena estudiantes, sobre la «Ndrangheta y familias comprometidas»; en la cual emergen las distorsiones de la familia cuando las dinámicas son invadidas por lógicas malsanas y orientadas por intereses de particulares o de grupos pequeños.
La Universidad como polo de excelencia de educación y propulsión de desarrollo para una tierra que aún sigue sufriendo económicamente. Lo había previsto don Alberione – quien al inicio de los años ’70 estuvo en Cosenza – cuando se hablaba de la naciente universidad y del rol que ésta habría tenido para la ciudad, que se honra del título de «Atenas de la Calabria».
La Universidad como polo de excelencia de educación y propulsión de desarrollo para una tierra que aún sigue sufriendo económicamente. Lo había previsto don Alberione – quien al inicio de los años ’70 estuvo en Cosenza – cuando se hablaba de la naciente universidad y del rol que ésta habría tenido para la ciudad, que se honra del título de «Atenas de la Calabria».
Serían muchos los encuentros a recordar: la jornada en el seminario para hablar a los seminaristas y catequistas sobre Internet; los dos días formativos para los periodistas de Calabria que han sido acreditados; el Gran Galà con danzas, canciones y testimonios; el Flash mob en la plaza con los chicos de Acción Católica y Agesci. Este el elemento distintivo del Festival de Cosenza: el hecho de haber logrado involucrar con iniciativas propias a las numerosas asociaciones y clubes locales.